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PERSONALIDADES EN CONFINAMIENTO-EL ARTE DE APACIGUAR LAS ACTITUDES INFANTILES

Descubrir nuestros comportamientos con relación al Análisis Transaccional PAN (Padre, Adulto, Niño) del psicólogo Eric Berne, ha sido el objetivo de la charla en línea “Personalidades en Confinamiento-El arte de apaciguar las actitudes infantiles”, a la cual asistieron 95 personas.

El Lic. Parmenio Zamora, quien posee una orientación en Psicología Social, es asesor en administración humanista de los recursos, y 15 años de acompañamiento a Procinco, dirigió el webinar el jueves 13 de agosto.

La Asociación Hondureña de Maquiladores, a través de su programa de capacitación PROCINCO, continúa brindando charlas online para personal de sus empresas afiliadas y en este tema se conoció que existen comportamientos que dependen de la programación mental, que nos gobiernan y determinan nuestra conducta.

Es interesante conocer de dónde se originan las raíces de estos programas, definidos éstos como la información que nos ha llegado y que hemos ido elaborando y configurando dentro de nosotros, pero que también se pueden desprogramar y reprogramar.

Estas raíces pueden venir de una influencia biológica; asimismo la familia influye mucho, es decir, los programas pueden ser de origen familiar y ancestral, modelos que se van reproduciendo a través de las generaciones; la iglesia también es un inculcador de programas, así como también la escuela, la política,  la influencia social o incluso estos programas pueden ser de creación personal.

El Padre, El Adulto, El Niño, son tres modos en que se manifiesta la programación mental que hemos recibido de las fuentes arriba mencionadas.

Alguien funciona en el modo Padre cuando busca el Deber, y se comporta en otros de manera crítica, castigadora, consejera, perfeccionista, pero también, justa, generosa, cariñosa, estricto y observador. Y es por ello que se subdivide en dos: Padre Crítico y Padre Protector, y ambos poseen aspectos positivos y aspectos negativos.

Este programa es importante porque contiene los elementos morales y culturales.

Alguien funciona en el modo Niño cuando es imaginativo, dócil, tierno, cariñoso, pero también, resentido, injusto, criticón, víctima. El programa Niño busca el Placer y evitar el Dolor. También se subdivide en dos: El Niño Natural y el Niño Adaptado, que puede ser Sumiso o Rebelde.

Alguien funciona en el modo Adulto cuando tiene tolerancia a la frustración, sabe lo que quiere, es asertivo, buscar respuestas y soluciones, controla o comprende sus emociones. En resumen, el programa Adulto busca lo que conviene para una saludable convivencia.

A través de la charla, el grupo de participantes pudo realizar varios ejercicios al aire para descubrir los tipos de comportamientos en varios ejemplos; así también, compartieron de qué forma el Análisis Transaccional puede ayudarles en sus relaciones personales y de qué forma apaciguar las actitudes infantiles del Modo Niño Adaptado. Al final, una de las reflexiones claves fue darnos cuenta que dependiendo de nuestra forma de pensar, de actuar y de nuestras actitudes, así va a ser nuestro destino, y que si funcionamos en el modo adecuado armonizaremos nuestras relaciones: “YO ESTOY BIEN, TÚ ESTÁS BIEN”.

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